El fabricante de robots Promobot busca personas que estén dispuestas a prestar sus rostros. Los voluntarios podrán vender la licencia de su rostro por una gran recompensa de $ 200,000. Las caras vendidas luego se atribuirán a robots humanoides que se comercializarán en 2023. Se utilizarán en hoteles, restaurantes, supermercados, etc.
Los robots humanoides son, en su mayor parte, personas del futuro. Se hacen para realizar tareas profesionales por copiar los gestos y comportamientos de los seres humanos. Además de su coste asequible, el trabajo que realizan mecánicamente es cualitativo. Esta relación precio-rendimiento y la innovación en automatización que muestran los hacen codiciados.
Hoy en día, los robots humanoides se utilizan en varios campos , como la inspección, el mantenimiento y más. Intentan satisfacer las necesidades de los hombres, aligerar su carga de trabajo y limitar los riesgos asociados a los accidentes laborales.
¿Robots con rostros totalmente humanos?
Los robots humanoides que ofrece la firma Promobot ya se comercializan en más de 45 países del mundo. Juegan y están asignados a varios trabajos como guiar, limpieza, consultas, etc. La empresa quiere ser escalable y ha expresado su deseo de expandir su sector empresarial. Trabaja activamente en el desarrollo de nuevas tecnologías relacionadas con la Inteligencia Artificial (IA), la asistencia por voz, el reconocimiento facial, etc.
La empresa ha estado en el campo durante algunos años y solo está progresando. Como parte de este nuevo proyecto, firmó un acuerdo con una empresa estadounidense . Para que esto suceda, Promobot alienta a cualquier persona de cualquier edad y sexo a ofrecerse como voluntario para prestar su rostro a la tecnología.
Algunas condiciones para los voluntarios
Aún se desconoce el nombre del cliente de la empresa. Su objetivo sería utilizar estos robots controlados en centros comerciales, aeropuertos y tiendas en América del Norte y Oriente Medio. El despliegue estaría programado para el año 2023 .
Promobot destacó que creará modelos en 3D de los rostros y cuerpos de quienes hayan manifestado su deseo de suscribirse a su oferta. Quienes sean seleccionados deberán firmar un acuerdo que permitirá a la empresa utilizar sus apariciones y voces por un período de tiempo ilimitado . También deberán realizar sesiones de dictado para alimentar el material vocal para que luego los robots puedan copiarlo.